La iniciativa apunta a ampliar el awareness y la visibilidad de la marca, aumentar su recordación y generar contenido de valor que conecte con las audiencias desde un lugar natural y afín al estilo de Chacabuco. Para ello, se seleccionaron plataformas y programas que reflejan su identidad y permiten integrar la marca de forma fluida y relevante.
Como parte de esta estrategia, se presentan dos grandes líneas de acción:
Presencia en LUZU
Reconocido por su comunidad sólida y su liderazgo en el formato, LUZU es uno de los espacios centrales dentro del plan. La propuesta incluye apariciones en programas clave como “Nadie Dice Nada” y “Antes Que Nadie”, priorizando calidad, impacto y visibilidad dentro de los ciclos de mayor alcance del canal.
Integración en OLGA
Con un enfoque más disruptivo, OLGA se suma a la estrategia con presencia destacada en “Soñé que Volaba”, el programa insignia del canal, conducido por Migue Granados, una de las figuras más influyentes y queridas del streaming argentino. Su llegada masiva, su
tono espontáneo y la química con la audiencia lo convierten en el espacio ideal para integrar a Chacabuco de forma natural, divertida y altamente visible.
La propuesta se complementa con participaciones en “Sería Increíble”, conducido por Nati Jota, Damián Betular, Eial Moldavsky y Homero Pettinato—donde Betular aporta un vínculo creíble con el universo gastronómico—, y en “Tapados de Laburo”, asegurando presencia
sostenida en los contenidos centrales del canal.
La decisión de incluir la presencia de alimentos elaborados con las harinas Chacabuco (panificados y focaccias) generó reacciones genuinas, comentarios positivos y hasta recomendaciones de las harinas por parte de los conductores, aportando naturalidad y un diferencial: una interacción auténtica que potencia la percepción de calidad y familiaridad de la marca.
